Educación, en general, es todo aquello que aprendemos (interiorizamos, memorizamos, que afecta nuestro comportamiento futuro) de manera intencionada de la sociedad. Sin embargo, en esta definición olvidamos la parte más importante: todo aquello que aprendemos "sin querer", que nos condiciona de manera aleatoria.
Y es que, solo hay que pensar en el funcionamiento del cerebro. Simplificando mucho, podemos convertirlo en el clásico esquema entradas » procesos » salidas. La particularidad es el hecho de que, dentro del cerebro, también se almacena información. Sin embargo, es fácil comprender que en realidad, todo lo que pasa por las entradas acaba determinando la salida.
Tiene sentido si lo piensas: a un niño hay que jugar a repetirle millones de veces la misma información hasta que comienza a comprenderla y asimilarla. Por supuesto, aceptando que el hombre es una máquina, se hace patente que podemos rentabilizar esa información, que podemos preparar la entrada, limitando la cantidad de ruido (entornos aislados) y controlando que información se codifica en la entrada.
Por supuesto, existirá un factor genético. Sin embargo, no soy de la opinión de aquellos que creen que los "sentimientos" y demás ideas "humanas" están codificadas en la genética humana. Resulta imposible creer que ideas capaces de cambiar tanto de un individuo a otro, de cambiar tanto en el tiempo, tan claramente dependientes de factores geográficos en el ámbito social (educacionales), no de parentescos familiares, puedan realmente estar predeterminados.
De esta manera, estaríamos diciendo, más o menos, que la mayor parte de la arquitectura cerebral, de la mente humana, se desarrollaría con la educación, y que pod´ria, por tanto, ser modificada como el que reprograma un robot.
Si, como algunos creen, los sentimientos y demás EAI (Entidades Altamente Improbables) son realmente algo intrínseco al hombre, al educar a una serie de recién nacidos de una manera que no incluya los susodichos EAIs, estos los mostrarán igualmente. Si, como digo yo, el hombre es una máquina no predeterminada, en la cual la genética juega un papel muy secundario, estos jóvenes se desarrollarían mucho más rápido de lo normal y sin mostrar en ningún momento interés ni conocimiento de las "viejas costumbre". Hablaré más de la posiblidad de una "educación perfecta" en futuras entradas, es un tema que considero vital.
No hay comentarios:
Publicar un comentario